Las nuevas tecnologías y su impacto en nuestra vida diaria
Las nuevas tecnologías y su impacto en nuestra vida diaria
Hace poco, teníamos la oportunidad de escuchar en una entrevista a Ben Hammersley, el editor de la prestigiosa revista Wired, que lleva desde 1993 centrándose en cómo la tecnología afecta a la cultura, educación, economía y política de la sociedad.
En la actualidad se dedica a dar conferencias por todo el mundo y ya ha publicado cinco libros.
El bueno de Ben aparece en escena mostrando un curioso bigote y exponiendo al público la historia de cómo acuñó el término “podcast” durante la redacción de un artículo para The Guardian sobre los nuevos archivos de audio.
Tras esta introducción, el británico empieza a mostrarse fascinado por el abaratamiento en el coste de lanzamiento de un cohete al espacio, que según él llevará en 15 o 20 años a las “niñas de 13 años a construir naves espaciales y enviarlas al espacio por menos del coste de un coche”.
Según Hammersley, hay un gran número de tecnologías que están a punto de surgir y explotar, tecnologías que son casi viables en la actualidad, como el camión que se conduce solo, pero que en cuanto sean totalmente viables supondrán un antes y un después en nuestras vidas.
Para ilustrar el modo en que la tecnología ya ha afectado a nuestras vidas, Ben Hammersley pone el ejemplo de su propia vida y cómo ha cambiado la compra tradicional por compra online, o el servicio antiguo de lavandería por un nuevo servicio online, y cómo todos estos detalles cotidianos han acabado modificando sus hábitos completamente.
Para el escritor, todo esto cambia el desarrollo de las ciudades y el modo en que queremos vivir, y se muestra preocupado por evitar la muerte de las antiguas instituciones en detrimento de las nuevas tecnologías.
En resumen, pese a su inquietante bigote, el famoso experto en las nuevas tecnologías y sus implicaciones para la sociedad moderna aborda un interesante tema en una sociedad que se ha visto increíblemente cambiada por las nuevas tecnologías en los últimos 20 años y aún no sabe a dónde le llevará su afán por descubrir siempre de forma insaciable más y más.
